La rotación de Io genera una radiación 1.000 veces mayor que la necesaria para matar a un ser humano desprotegido. Existen evidencias de una intensa actividad eléctrica en Io.
«Io posee un tamaño similar al de nuestra Luna. Y debería ser un mundo muerto y frío. Pero nuestro primer contacto con Io nos ha revelado un satélite que hierve con una gran actividad volcánica. Algo más debe estar produciendo este poderoso vulcanismo.
— Profesor Brian Cox, » Wonders of the Solar System: Dead or Alive» («Maravillas del Sistema Solar. Vivo o muerto»)
En diciembre de 1999, cuando la sonda espacial Voyager 2 descubrió una «sorprendente actividad volcánica» en la luna Io, el físico de plasma Wal Thornhill predijo que los penachos que erupcionan de los llamados «conductos volcánicos» deberían ser más calientes que cualquier flujo de lava aquí en la Tierra. Su predicción se confirmó cuando se midió la temperatura alrededor de la «caldera». El valor que se registró superaba los 5.700 C. Esto demuestra la intensa actividad eléctrica en Io.